La compañía Austriaca Rasenreich nos demuestra por qué no toda la tecnología tiene que ver con cables y chips, tecnología también es diseño, y este balón es una muestra de ello.
Los jugadores de hoy en día son mas efectivos y por lo tanto necesitan técnicas de entrenamiento más exigentes, dominar el balón con más estilo y efectividad.
Rasenreich lanzó este nuevo balón para entrenamientos, se asemeja a un huevo y por su puesto que no responde como un balón tradicional, los jugadores deberán estar más alertas y pueden desarrollar instintos más finos.
Ojalá todos y cada uno de los jugadores de nuestra selección recibieran uno de estos antes de irse de viaje a Sudáfrica.
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